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¿Qué posibilidades hay de que justo a cada lado de tu casa vivan dos tias buenas tetonas, simpáticas, maduritas y además muy putas? Ciertamente pocas, por eso este tío se siente como si le hubiera tocado la lotería, y yo diría que es aún mejor. Tener a estas macizorras siempre dispuestas a echar un polvo no es cualquier cosa, como el paraíso en la tierra, pero si además son un poco viciosas y eso de follar en grupo las pone mucho, podemos estar seguro de que éste no se mudara...
Trio con vecinas de edad madurita
